O martes 14 de febreiro do 2017 iniciamos en Arcade (Soutomaior) o espazo Autocoñecemento para o bo trato, un obradoiro vivencial teórico-práctico organizado desde o CIM e promovido polo concello de Soutomaior.
Xuntámonos 18 mulleres ao longo de catro meses, nun total de 10 sesións de 3 horas cada unha. Xuntas aprendemos, démonos conta de moitas cousas, vivimos, compartimos e adquirimos ferramentas para mellorar as nosas vidas…
Na última sesión, abrimos un espazo para que cada unha puidera expresar algo da súa viaxe no grupo, puidera compartir algo do camiño realizado… Recollemos aquí algunhas destas achegas:
– “Yo sí que siento que he hecho un viaje desde el primer día hasta hoy. Me siento una mujer más pausada en este recorrido. Venía muy acelerada y me siento más tranquila… Buscaba el buen trato y esto me repercute en la relación con mi familia. Me siento más armoniosa en general y estoy feliz por eso. A nivel más interior siento que hay aquí algo nuevo que se ha abierto para seguir, algo hacia las demás mujeres, hacia la sexualidad, hacia mi misma… cosas para compartir, para seguir aprendiendo. Eso es lo que destacaría de mi camino. Y después como ejercicios, el cuerpo de la dignidad, las respiraciones… Me siento una mujer más poderosa!“
– “Eu son unha persoa moi tímida e para min foi a primeira vez, desde que estou en Arcade, que me sentín arroupada por outra xente. Con vós sentinme cunha especie de familia. Desde que tivera o neno non fixera ningunha actividade, nunca tivera un tempo para falar, para intercambiar opinións e a min este curso fíxome sentir especialmente ben. Estás máis achegada a unha xente que a outra, pero hai dúas ou tres persoas coas que me sentín especialmente a gusto, moi conectada… O único malo foi non poder asistir a todas as sesións, pero polo demais, para min foi moi positivo. Todo o que vivimos xuntas sorprendeume e moito para ben. Nada máis…”
– “Para mí también fue un camino de mucho autodescubrimiento. También fue un camino de mucha tierra. Me siento empoderada, me siento tranquila también. Y el cuerpo de la dignidad es algo que me viene mucho a la cabeza: cuando voy caminando sola por la calle, pongo la postura y es como que tomo consciencia de que ya voy derecha por la calle y me hace sentir en calma y al final es lo que te hace sentir bien. Para mí, un aprendizaje de vida es que siempre estamos buscando algo especial fuera y en realidad lo que todos buscamos es paz interior… El llegar a esa paz y estar bien es para mí la clave del éxito. Y ahora mismo me siento así. Tengo nuevos proyectos, voy a ellos y ahora ya me siento con la capacidad de dar pasos. Ya es el momento. Este camino me ayudó a equilibrarme y a estar en tierra y a estar bien. Entonces es muy positivo.”
– “A mí también me dio tranquilidad, me conocí más, me noto más tranquila, y aprendí mucho escuchando a mis compañeras y escuchándome a mí misma. Conocí cosas de mí en las que no me había fijado, a lo mejor… y me di más cuenta. Y para mí también este taller es muy positivo y lo único es la pena de que se termine aquí. ¡Si, saqué algo bueno de todo esto!”
– “Cuando llegué al grupo llegué bastante mal, no me sentía capaz de dar el paso que tenía que dar porque siempre estuve protegida por hombres, siempre protegida. Creía que no era capaz yo sola de salir adelante y a lo largo de este camino me quiero más a mí misma, me respeto más, se puede salir adelante una sola, no necesitas a nadie… He conocido aquí a gente maravillosa y ahora sé que no estás sola en la vida, que hay muchísima gente con muchísimos más problemas y que lucha. Y me da pena que se acabe todo esto que hacemos aquí… es más, cuando me levanto me levanto super-nerviosa, de mala leche, pero es llegar aquí y ya estamos a gusto. Y aprendí mucho, tanto de mis compañeras como de ti, Tareixa, y el día de mañana ojalá fuera como tú. ¡Y nada más, que me sirvió de mucho, mucho, mucho! Y gracias por todo.”
– “Bueno, para mí, a pesar de que fue la segunda vez que hago este taller, los grupos son diferentes y aprendemos cosas nuevas. Yo creo que estoy en un buen momento y el taller me ha servido para aprender más cosas de mí. Sobre todo, trabajar en grupo es super-rico porque a través de las demás vas descubriendo cosas de ti misma. Cuando veníamos de camino para aquí una compañera y yo decíamos: “bueno hoy es la última sesión…”, pero yo no lo siento como la última porque sé que esto sigue. Sé que cada una de nosotras vamos a seguir nuestro camino y puede que nos encontremos o no pero para mí no es una despedida, al contrario, es como seguir con todo lo bueno que nos llevamos de aquí. Y también me encantaría que tú también, Tareixa, te llevaras un montón de cosas. Como que me llevo muchísimo, pero que me queda mucho por trabajar y sigue este camino aunque no estemos juntas físicamente… Nada más. Muchísimas gracias al grupo y a ti, Tareixa.”
– “Aquí viña coas miñas cousas e encontrei una familia, e descubrín que tiña un montón de complexos e que non vale a pena, que todas somos mulleres e que todas somos iguais… Aprendín que eu non son distinta, que non teño nada distinto e perdín moitos complexos. Descubrín que para querer a alguén, o primeiro é quererme a min mesma. Iso é o primeiro: darnos o noso tempo, que moitas veces non o facemos, dedicar tempo para nós, que é moi importante… Pensar en todos, pero tamén en nós. E marcho encantada porque aprendín moito e gustaríame continuar. Estou feliz de chegar aquí, e o que dicides: é unha paz. E logo o corpo da dignidade, iso creo que é fundamental, os pés na terra creo que é unha ferramenta moi, moi poderosa. Grazas Tareixa!”
– “Yo soy una persona lenta en muchos aspectos y creo que me dedico mis tiempos, me escucho, pero cuando vine al curso tenía una carga de atención y de esfuerzos enfocados a mi madre… Me sentía encerrada, como oprimida, ahogada. Para mí, es necesario poder salir, desconectar a mi aire, nutrirme de los demás y “la excusa del curso” me sacaba de ese entorno. El taller me vino bien. Y sentir el latido del grupo, también cuando ha habido gente que no venía y la echas en falta porque te vas acostumbrando a su presencia, al sentir de cada una… porque cada una tiene su sentir, aunque hay muchas cosas en común, como el bagaje educativo y cultural que llevamos las mujeres. Somos distintas unas de otras, pero ha habido un latir común y eso me ha parecido bonito… También sentir el crecimiento del grupo y sentir que el curso ha aportado algo a cada persona. A mí me ha aportado un espacio de conexión y luego el ser más consciente. Esto fue un intensivo de consciencia de mi cuerpo, de mi mente y me ayudó a centrarme. Y luego hablar de las inquietudes de cada una, de los miedos, de las búsquedas… Es cederte ese tiempo de escucha para los demás y de escucha también de mi misma… Yo me considero una persona afortunada porque tengo una red de amigos amplia y diversa, pero por imperativos del día a día faltan esos tiempos para “hablar de verdad”. Y al final, este curso ha sido muy particular porque brinda un espacio para recuperar tiempos de calidad con las personas. Ha sido un placer también conocerte, Tareixa, y conocer tu forma de trabajar, que me parece empoderante y enriquecedora. Y ayuda a crear red y aquí se ha creado red, y la intención es seguir viéndonos con una periodicidad. Esa sensación de red es importante y genera un punto de inflexión para muchas. Para mí la red es super-importante, es una red más en mi vida.
– Pues nada, yo aprendí mucho y me encantó. ¡Ya está!
– Tareixa: Ben, pois eu quero darvos as grazas a cada unha de vós. Para min tamén, este espazo foi tremendamente enriquecedor, desde outro lugar, como facilitadora, que é o papel que me tocou desenvolver neste grupo. Foi un verdadeiro pracer ir vendo como cada unha de vós fostes medrando en aspectos, collendo ferramentas e adquirindo máis consciencia. Sempre digo que cando unha muller medra e mellora nalgún aspecto da súa vida, todas as demais melloramos… Graciñas! E ata a próxima encrucillada, que de seguro que nos imos reencontrar nalgún dos múltiples camiños da vida… Creo que nos merecemos un bo aplauso!
E todas nos aplaudimos con forza…
REENCONTRO 